No dijeron lo que dijeron

Después de que el pasado sábado 20 se convocara a una conferencia de prensa, precedida por el presidente nacional de PAN, Ricardo Anaya, y su homóloga del partido de izquierda PRD, Alejandra Barrales, medios mexicanos señalaron la posibilidad de una unión de los partidos para las presidenciales del 2018. Las declaraciones de ambos líderes partidistas, cimbraron los proyectos políticos para el próximo año electoral, incluso, el temblor más fue se sintió en el Estado de México, entidad en la cual el próximo 4 de junio, se desarrollarán comicios electorales para gobernador y presidencias municipales. Después, de que el pasado sábado 20 se convocara a una conferencia de prensa precedida por el presidente nacional de PAN, Ricardo Anaya, y su homóloga del partido de izquierda PRD, Alejandra Barrales, medios mexicanos señalaron la posibilidad de una unión de los partidos para las presidenciales del 2018. Los siguientes nombres son los que aspiran dirigir los destinos del Estado de México, por cierto, una entidad de mayor relevancia económica del país; Alfredo del Mazo Maza (PRI), Josefina Vázquez Mota (PAN), Delfina Gómez (MORENA), Juan Zepeda Hernández. PRD, Oscar González Yáñez (PT), María Teresa Castell de Oro Palacios (Candidata independiente).

Ahora, las rectificaciones de ambos líderes salen a primera hora, tal parece, que el engrudo se les hizo bolas, dicen que no quisieron decir lo que dijeron. Hoy, dejan en claro que para una alianza que primero hay que analizar al candidato presidenciable para el próximo año. ¿Pero que motivó a la dupla partidistista, a manifestar la posible alianza, entre la derecha y la izquierda?, ¿para ganar espacios políticos, o bien será que en el análisis ambos partidos conocen con certeza, que ya no tienen rentabilidad electoral?, de ser así, lo saben que desde el ámbito municipal ambos han fallado. El pecado político de Ricardo Anaya, al hacer que su mensaje se interpretará como una seria alianza con el PRD, no tiene vuelta, las taquicardias que provocó, sembraron dudas, de su liderazgo. Con Este acto, los señores del poder, intuyen que Andrés Manuel López Obrador ya no es un mito político, por el contrario, el partido que formó sí está dando la batalla, y se ha convertido en un serio dolor de cabeza.

El que ni lento , ni perezoso fue Juan Carlos Martínez Terrazas presidente estatal del partido Acción Nacional en el estado de Morelos, se deslindó tajante de los pronunciamientos de Ricardo Anaya, “no es afecto al manejo de las redes sociales”, pero ésta ocasión las utilizó habido de desmarcarse, de una supuesta alianza para el 2018 en tierra zapatista, tanto, que en su mensaje aseveró que los gobiernos de Peña Nieto y de Graco Ramírez se han distinguido por la falta de desarrollo social, corrupción y la imparable delincuencia.

Pese a las aclaraciones y correcciones de Anaya y Barrales, ya sembraron desconfianza entre los panistas radicales y los neopanistas, asimismo, sucede entre las corrientes de partido del sol azteca. No cabe duda, que en “Política no hay destino si no consecuencias”, y estas se verán el próximo 4 de junio en el Estado de México, Coahuila, Nayarit y Veracruz.

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